Por ejemplo, la palabra slavery –esclavitud-, tiene un pico durante la Guerra Civil Americana (1861-1865) y en el movimiento por los derechos civiles de los años 60. De ahí que podamos inferir la importancia del asunto durante dichos periodos.

Como no podría ser de otra manera, el invento proviene de Harvard, y Google ya se ha lanzado con su adaptación online, www.culturomics.org.

He ahí algunas curiosidades que, como un niño con zapatos nuevos, he podido graficar:

El programa permite, además del inglés, buscar palabras en español, alemán, francés y ruso. Veamos qué pasa con la palabra свобода –libertad-.

Divertido, eh? Bueno, para los pobres rusos supongo que no mucho.

Y para mis amigos austríacos, un brote de esperanza.

En definitiva, se han acabado los tiempos en que los historiadores nos vendían sus subjetivas interpretaciones como si fuesen hechos contrastados. A partir de ahora, deberán echar mano de esta nueva herramienta para persuadirnos de sus análisis. También puede jugar su papel a la hora de encontrar variables instrumentales para estudios econométricos. Veremos.

No obstante, aviso para navegantes: todo análisis econométrico se refiere a datos pretéritos y, por lo tanto, sólo puede informarnos de tendencias pasadas y no futuras. Que nadie espere encontrar en Culturomics la sombra alargada de Hegel.

Por Guillem Laporta